A-P

¿Qué pasaría si el mundo se quedará sin recursos naturales para alimentar a la población?

¿Qué pasaría si los laboratorios encontraran la solución para salvar a la humanidad a través de una píldora?

¿Qué pasaría con los cuerpos humanos?

Devolution es un proyecto de investigación e instalación que parte de una historia de ficción de un mundo distópico, en donde los recursos se han agotado debido a la infertilidad de la tierra, consecuencia del mal manejo de las industrias del pasado, sumado  al gran aumento de la población en los últimos años.

Un laboratorio financiado por el gobierno, desarrolló una solución para salvar a la humanidad: esa solución llegó en forma de una píldora química que suplanta a los alimentos. Los laboratorios comenzaron a dar estas píldoras a los humanos para salvar a las poblaciones globales.

Algunos gobiernos hicieron obligatoria la píldora, regulando el consumo público de la misma.  Donde a cada persona se le proporcionó la “Píldora de equilibrio perfecto”. Esta es la píldora que contiene todas las vitaminas y proteínas que el cuerpo necesita para sobrevivir en este nuevo mundo. Con esta metodología de alimentación, los gobiernos también controlan la cantidad de energía que cada persona debe tener dependiendo de su estatus social. En algunos casos se complementa con medicamentos para aumentar la productividad de los trabajadores.

 

Esta maquina dentro de la instalación es el primer acercamiento de las personas con los métodos de alimentación del futuro.

PB1 MACHINE, es la máquina inteligente que nos alimentará en este futuro distópico.

Esto, nos provee la píldora de «equilibrio perfecto» a través de reconocimiento facial.

Solo tenemos que poner nuestra cara frente a la cámara, y después de unos segundos, la máquina podría reconocer quiénes somos y qué necesitamos para sobrevivir en este nuevo mundo, brindándonos la «Perfect Balance Pill» que necesitamos. 

Después de miles de años, esta metodología de alimentación se ha convertido en el estándar global, y los seres humanos han evolucionado como resultado directo. Estos parientes lejanos no tienen dientes, por ejemplo, ya que dejaron de tener la necesidad de masticar hace muchos años. Tienen el mismo color de piel, no producen vitamina D12, sus cerebros son más pequeños y no necesitan habilidades para resolver problemas (la computadora les proporciona soluciones a todos).